Amarraron a Pastor en un poste para ser golpeado hasta la muerte, pero fue liberado milagrosamente.

Un pastor fue golpeado por hindúes radicales en un poste en una vía pública y se salvó de la muerte después de que le desataron las manos milagrosamente en India el mes pasado.

Según Morning Star News, el 25 de febrero, extremistas hindúes acusaron a Kelom Kalyan Tete de convertir a la gente al cristianismo por la fuerza, lo secuestraron y lo ataron a un poste en medio de una concurrida intersección en la ciudad de Delhi.

En un video que circula en las redes sociales, se ve al pastor Tete, de 35 años, sollozando mientras más de 150 personas, incluidos niños con uniforme escolar, lo insultan y lo atacan. “Una gran multitud me rodeó y me golpeó, incluidos escolares que me patearon”, dijo el líder a Morning Star News.

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Kelom Tete fue golpeado en la cabeza, el pecho, el estómago, la espalda y recibió repetidas bofetadas en la cara. “Me golpearon tantas veces en la cabeza que comencé a sangrar por la nariz y la boca, pensé que tenía el hueso de la nariz roto. Tomaron agua y me la echaron en la cara, me limpiaron la sangre con un pañuelo y empezaron a golpearme de nuevo”.

Tete ya había sido atacado por los radicales ese mismo día en otro lugar y, alrededor de las 10 de la mañana, fue sacado a la vía pública, amarrado a un poste y golpeado hasta el mediodía. “Dijeron: ‘Vamos a romperle las piernas, atarlo a un árbol’. Estaban conspirando para matarme”, dijo Kelom.

Durante el episodio de crueldad, ningún transeúnte se pronunció en contra de la agresión ni llamó a la policía. “Podrían haber cuestionado a los hombres que me golpearon que no se tomaran la justicia por su mano y que si tenían algún problema llamaran a la policía. Pero es tan doloroso que nadie ha dado un paso adelante. Todos en silencio los vieron tratarme de una manera tan inhumana”.

“Me quedé en silencio como si Jesús estuviera en la cruz. Toda mi fuerza se ha ido. Mi visión se nubló y no podía escuchar correctamente debido a múltiples bofetadas en la cara. Perdí la voz por un tiempo y ya no podía gritar pidiendo ayuda”, dijo.

En ese momento, los extremistas dijeron que lo iban a golpear con un garrote y el pastor creyó que lo matarían. Sin embargo, cerca del mediodía, las cuerdas que ataban las manos de Tete se desataron milagrosamente.

“El Señor me salvó, creo que me desató las manos”, testificó el líder. Así logró escapar entre los autos que pasaban por la avenida y llegó a su casa.

La policía local aún no ha arrestado a ninguno de los atacantes y dijo que está investigando el caso. Según Pastor Tete, en un principio las autoridades se negaron a registrar un caso, y fue solo después de que la prensa informara del ataque que la policía hizo un informe.

Además, el pastor afirmó que la policía está tergiversando y minimizando el caso. “La policía no está reuniendo las imágenes de video de la intersección, pero están tratando de incriminarme. Todo quedará claro después de que obtengan la evidencia de las cámaras”, dijo Tete.